La Federación de Asociaciones de Periodistas de Castilla-La Mancha recuerda a los políticos que se deben a los ciudadanos y que cuando se niegan a responder a las preguntas que les plantean los periodistas la gran perjudicada es la sociedad, no el periodista o el medio de comunicación.
El periodismo, y también el periodista, debe resultar incómodo al poder. Porque uno de los principios del periodista debe ser destapar lo que los poderes quieren ocultar. Y denunciar abusos que se están produciendo y con los cuales se debilita la democracia. En resumen, hacer de contrapoder, informar y denunciar.
Los responsables públicos no deberían hablar únicamente con medios de comunicación que consideran próximos o con periodistas cercanos. Porque esta situación, dañina, perjudica a la sociedad, al periodismo y a la propia clase política. Y es, en parte, responsable del descrédito que periodistas y políticos tienen en este momento entre los ciudadanos.
Los periodistas tienen una misión de control de los poderes públicos que no deben perder. Como sostiene el Manifiesto de la FAPE en Defensa del Periodismo, “la salud de la democracia se resiente sin una prensa libre y crítica con el poder”.
Las asociaciones de periodistas lamentan, en este sentido, las reacciones poco democráticas que están demostrando algunos políticos ante los periodistas que plantean preguntas molestas. Y rechazan que estos políticos se nieguen a responder a las preguntas, porque la defensa de la libertad de prensa no solo atañe a los periodistas sino también a las instituciones, a los poderes y al conjunto de los ciudadanos.
Sin comentarios