lanzadigital.com – Julia Yébenes – 14/10/2020
Las mujeres ganan un 17,08% menos que los hombres de salario medio anual
El sindicato de Medios de Comunicación de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT (FeSMC-UGT) y la Agrupación de Periodistas de UGT reclaman que haya una igualdad salarial real entre mujeres y hombres en el sector de los medios de comunicación. Los últimos datos publicados por la Encuesta Anual de Estructura Salarial del INE, correspondiente a 2018, sitúan la brecha salarial en el 17,08% en esta rama de actividad económica. Esto significa que las mujeres de este sector tienen un salario medio anual de 29.099,47 euros, mientras que los hombres obtienen 35.411 euros.
En los últimos diez años la brecha salarial sólo se ha reducido un 1,95 en este sector, lo que supone que las mujeres tardarán aún muchos años en lograr la igualdad salarial real. El sindicato considera un gran avance las medidas aprobadas en el último Consejo de Ministros para lograr la igualdad salarial real entre hombres y mujeres. No obstante, la organización hace un llamamiento a las empresas para que se impliquen en el compromiso de reducir las desigualdades de género en el ámbito laboral, a través de la negociación colectiva, y que se habiliten más recursos económicos y humanos para llegar a todos los rincones de este país y se pueda garantizar así una igualdad salarial real entre mujeres y hombres.
El Gabinete Técnico de la FeSMC-UGT, organismo del sindicato donde se encuentran ubicados los trabajadores y trabajadoras de los medios de comunicación, ha elaborado un informe -a partir de la Encuesta de Población Activa, del segundo trimestre del 2020- que muestra que en el sector de medios de comunicación (radio, televisión, prensa y agencias de noticias) se encuentran ocupadas 95.943, un 2,9%, más que el año anterior. Es decir, no sólo ha resistidos los efectos de la pandemia, sino que se ha producido un incremento de empleo, cuantificado en 2.600 personas.
La actividad que ha registrado un mayor crecimiento de la ocupación ha sido la radio, con una subida del 48 % y más de 4.000 empleos nuevos; también ha crecido el empleo, aunque en menor medida, en las agencias de noticias y en prensa (un 12,7 y un 7,4 % respectivamente).Por el contrario, la ocupación se ha reducido en televisión un 16,2 %, lo que ha supuesto la pérdida de 5.634 empleos.
Las actividades que concentran mayor porcentaje de empleo son prensa (50,1 %), televisión (30,4 %) y radio (14,4 %), dejando a las agencias de noticias en último lugar, con tan solo un 5,1 % del total.
Las personas asalariadas representan el 89 % del total de personas ocupadas (85.476), si bien los porcentajes varían en función de la actividad analizada.
Las mayores tasas de salarización (asalariados/ocupados) se encuentran en radio y televisión, con un 99 y 97 % del total respectivamente. En cambio, las actividades de las agencias de noticias y prensa son las que concentran el mayor volumen de personas ocupadas por cuenta propia (48 y 14 % respectivamente).
Como se puede observar, ha sido el empleo autónomo el que más ha crecido en este último año, un 7,6 %, frente al 2,3 % que lo ha hecho el empleo asalariado. Es decir, contamos con 739 personas autónomas y con 1.924 personas asalariadas más.
El crecimiento del empleo autónomo es consecuencia del significativo incremento generado en las agencias de noticias, que ha pasado de contar con 149 empleos en 2019 a 2.368 en 2020, ya que el resto de actividades ha sufrido descensos apreciables.
En cuanto al crecimiento del empleo asalariado, ha estado protagonizado por la radio y la prensa, que han experimentado incrementos del 49,5 y 12,5 % respectivamente, añadiendo entre ambos más de 9.000 puestos de trabajo nuevos.
El sector presenta una distribución por género bastante equitativa en términos de empleo asalariado, representando los trabajadores el 51 % frente a un 49 % de trabajadoras.
Este porcentaje de trabajadoras está por encima de la media del conjunto de los sectores de actividad, un 48 %, si bien en algunos subsectores el porcentaje es mayor, como en el caso de las agencias de noticias, donde las profesionales representan el 83 % de las plantillas. Sin embargo, en otros, como en televisión, el porcentaje de mujeres ocupadas apenas llega al 36 %.
En cambio, si tenemos en cuenta solo a las personas trabajadoras autónomas, son los hombres los que adquieren un papel protagonista, con un 77 % del total y muy por encima de la media de todos los sectores (66 %).
Hay actividades como la radio y la televisión donde todo el empleo autónomo es masculino. Sin embargo, en las agencias de noticias y prensa, las mujeres alcanzan un mayor peso, con el 33 y el 24 % del trabajo autónomo respectivamente.
La temporalidad afecta en mayor medida a las mujeres (18,1 %) que a los hombres (14,1 %), con una diferencia de 4 puntos porcentuales y muy por debajo de la media del conjunto de los sectores (24 % para las mujeres y 20,9 % para los hombres).
La jornada a tiempo parcial adquiere una mayor magnitud en el caso de las trabajadoras, alcanzando el 22,6 % del empleo femenino, frente a tan solo un 5,4 % en el caso de los hombres. En este caso, la tasa de parcialidad femenina se encuentra por encima de la media de todos los sectores (21,8 %).
La jornada a tiempo parcial penaliza doblemente a las mujeres, durante su vida activa por los bajos ingresos, y después de la jubilación, por los requisitos exigidos para percibir una pensión. Las responsabilidades familiares son la causa de elegir una jornada a tiempo parcial para un 25,4 % de las profesionales de los medios, frente a un 14,5 % en el caso de los trabajadores, lo que pone de manifiesto que siguen siendo las trabajadoras las que tienen que conciliar su vida familiar y laboral en mayor proporción que los hombres.
Por tanto, se hace necesario adoptar medidas a favor de la corresponsabilidad entre mujeres y hombres en los cuidados familiares a través de la negociación colectiva, así como fortalecer la oferta pública de infraestructuras y servicios relacionados con la dependencia con empleo y recursos públicos de calidad, que eviten el abandono del empleo de las mujeres para dedicarse al cuidado de personas dependientes.
Al analizar los puestos que ocupa el personal de los medios de comunicación en sus empresas, los cargos directivos representan el 6 % del total para ambos sexos, con una clara segregación a favor de los hombres (7,9 %) y en detrimento de las mujeres a las que se les obstaculiza el alcance de puestos de dirección (4,1 %).
En cambio, en el caso de los puestos técnicos y administrativos, observamos una diferencia de 2,6 y 4,2 puntos porcentuales respectivamente a favor de las mujeres.
Esta situación contrasta con el mayor nivel de cualificación que ostentan las trabajadoras respecto a sus compañeros de profesión: el 90,1 % de las mujeres cuenta con estudios postsecundarios o universitarios, frente al 83,9 % de los hombres.
Esta desigualdad en el reparto de tareas tiene, como consecuencia lógica, una desigualdad en materia de retribución.
La última brecha salarial que hemos conocido por la Encuesta Anual de Estructura Salarial del INE, corresponde a 2018 y se sitúa en el 17,8 % para la actividad de Información y Comunicaciones, en la que se hallan encuadrados los medios de comunicación.
Aunque se trata de una brecha inferior a la registrada para el conjunto de los sectores de actividad (21,4 %), supone estar hablando de un salario medio de 29.099,47 euros que perciben las mujeres anualmente, frente a los 35.411,23 euros que cobran los hombres, con una diferencia de 6.311,76. Es decir, las mujeres ganan el 82,2 % de lo que ingresan los hombres.