La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha expresado su consternación ante lo que considera una política de exterminio de periodistas en México tras el asesinato del director del portal informativo ‘El Observatorio del Sur’, Nevith Condés Jaramillo, tres semanas después de que otros tres informadores murieran en las mismas circunstancias, en medio de un recrudecimiento de los ataques contra la prensa en la nación norteamericana.
La organización española, que preside Nemesio Rodríguez, asume y respalda el comunicado emitido por la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) después de que el periodista mexicano haya sido asesinado en Tejupilco. Según ha recordado la FAPE, en lo que va de año, un total de 13 periodistas y comunicadores sociales han sido asesinados sin que ninguno de los responsables materiales o intelectuales haya sido llevado a la justicia.
De este modo, ha explicado que la FEPALC ve con «especial preocupación que la violencia contra los periodistas en México se esté normalizando» por lo que hace un llamamiento a todas las organizaciones de periodistas en el mundo y organismos internacionales para que miren el «horror» que ocurre en México. «¿Cuántos colegas más tienen que asesinar para que el mundo se movilice en torno a esta atrocidad?», plantea la organización. Así, la FAPE se suma a la FEPALC, que representa a sindicatos y federaciones de periodistas de América Latina y el Caribe, en su repudia de este nuevo asesinato y se une al clamor de su afiliado, el Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa de México para exigir al presidente Andrés Manuel López Obrador una política de protección efectiva y lucha frontal contra la impunidad.
«En circunstancias como estas reconocemos más que nunca la necesidad de contar a nivel de Naciones Unidas con un convenio internacional como el que viene impulsando la Federación Internacional de Periodistas (FIP), que incrementaría la presión a los Estado para que prevengan y castiguen a los agresores de periodistas y combatan la impunidad», han recalcado.
Asimismo, han destacado que en los últimos tres años México ha sido el país más peligro para ejercer el periodismo, con más crímenes que territorios en guerra. «No aceptamos más las versiones oficiales, que se han sucedido gobierno tras gobierno, que intentan descartar la pista profesional en la mayoría de los casos. El Estado mexicano tiene que asumir su responsabilidad. Recurrimos por ello –de manera especial– a la Unión Europea a invocar la cláusula democrática de los acuerdos comerciales suscritos con México.
As su juicio, «no puede considerarse democrático un Estado que mantiene cifras de impunidad de 98% en los crímenes» de periodistas. «México se desangra y esta vez gobiernos y criminales tienen que oír la voz de los periodistas del mundo que no estamos dispuestos a seguir enterrando colegas por el hecho de ejercer su trabajo», han subrayado.
El comunicado emitido por la FEPALC y asumido y respaldado por la FAPE, está rubricado tambien por la Federación Nacional de Periodistas del Ecuador (FENAPE), la Federação Nacional dos Jornalistas (FENAJ), la Federación Colombiana de Periodistas (FECOLPER), el Sindicato Nacional de Periodistas de Costa Rica, la Federación Nacional de Trabajadores de los Medios de Comunicación Social de Chile (FENATRAMCO), la Associations des Journalistes Haitiens (AJH). El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa de México (SNRP), el Sindicato de Periodistas de Panamá (SPP), el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), la Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP), la Asociación de Prensa Uruguaya (APU), el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de República Dominicana (SNTP) y el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela (SNTP) también suscriben el texto.